gato dormido tumbado soñando con la felicidad
Centro de Coaching en Asturias “Tu Propia Vida”. Sesiones y formaciones para particulares y empresas

Cómo evitar la procrastinación: Deja de posponer y empieza a actuar

Seguro que te suena esa sensación: sabes que tienes que hacer algo, pero de repente te encuentras organizando los calcetines por colores, investigando la dieta de los koalas o viendo el tercer episodio de una serie que ni siquiera te gusta. Procrastinar es ese arte de posponer lo importante para hacer… básicamente, cualquier otra cosa. Pero no te preocupes, ¡es algo que todos hemos hecho alguna vez! Lo importante es aprender a gestionarlo para que no se convierta en un obstáculo en tu vida.

En este artículo, te voy a dar algunas claves prácticas para evitar la procrastinación y empezar a tomar las riendas de tu tiempo. Y no, no te preocupes: no voy a decirte que simplemente “te pongas las pilas”. Aquí vamos con estrategias útiles y realistas.

¿Por qué procrastinamos?

Antes de entrar en cómo solucionarlo, vamos a entender el por qué. La procrastinación no es simplemente falta de ganas; suele estar relacionada con factores emocionales y psicológicos como:

1. Miedo al fracaso: Si creemos que no haremos algo “perfecto”, preferimos no hacerlo.

2. Falta de motivación: Cuando una tarea no nos resulta interesante o significativa, el sofá y Netflix ganan la batalla.

3. Perfeccionismo: Curiosamente, las personas más perfeccionistas tienden a procrastinar más. Es una forma de evitar enfrentarse a resultados “imperfectos”.

4. Agobio: Cuando una tarea parece demasiado grande, nos bloqueamos. Es como mirar una montaña gigante y pensar: “Mejor mañana”.

Estrategias para combatir la procrastinación

Aquí va lo bueno. Estas son estrategias concretas que puedes usar desde ya para reducir (o incluso eliminar) la procrastinación de tu vida.

1. Divide y vencerás: fracciona tus tareas

Si una tarea te parece demasiado grande, divídela en partes más pequeñas. Por ejemplo, si tienes que escribir un informe, empieza con algo simple como elegir el tema, buscar información o escribir solo la introducción.

Ejemplo práctico:

• Tarea grande: “Escribir un libro” (miedo total).

• Microtareas:

• Escribir el índice.

• Redactar el primer párrafo.

• Revisar el capítulo 1.

Cuando una tarea parece más manejable, el cerebro deja de entrar en modo pánico y tú entras en acción.

2. La regla de los 2 minutos

Esta regla es un truco de productividad súper eficaz: si una tarea te lleva menos de 2 minutos, hazla ahora. En lugar de anotarla en una lista interminable, simplemente hazla y punto. Sorprendentemente, muchas veces empezamos con algo pequeño y terminamos haciendo más de lo que planeábamos.

3. Crea un ambiente proactivo

Nuestro entorno influye mucho en nuestra capacidad para concentrarnos. Si trabajas en una habitación llena de distracciones (¡hola, móvil!), será mucho más fácil caer en la procrastinación.

• Organiza tu espacio de trabajo.

• Apaga notificaciones.

• Usa herramientas como aplicaciones que bloqueen redes sociales mientras trabajas (Focus@Will, Freedom, etc.).

Piensa en tu entorno como un aliado, no como un enemigo.

4. Establece metas SMART

¿Sabes qué significa SMART? Es un acrónimo en inglés que te ayuda a fijar metas claras:

S: Específicas (Specific).

M: Medibles (Measurable).

A: Alcanzables (Achievable).

R: Relevantes (Relevant).

T: Temporales (Time-bound).

Por ejemplo, en lugar de decir “quiero hacer más ejercicio”, di: “Voy a correr 3 días a la semana durante 30 minutos cada día”. Cuanto más clara sea tu meta, más difícil será procrastinar.

5. Recompénsate por los progresos

El cerebro ama las recompensas. Cada vez que completes una tarea, date un pequeño premio. Puede ser algo tan simple como tomarte un café, salir a dar un paseo o ver un capítulo de tu serie favorita. Esto crea un vínculo positivo entre el trabajo y el placer.

6. Usa el método Pomodoro

Este método divide tu tiempo en bloques de 25 minutos de trabajo intenso seguidos de 5 minutos de descanso. Después de cuatro bloques, tomas un descanso más largo (20-30 minutos). Es una técnica eficaz para mantener el foco sin agotarte.

Ejemplo:

1. Trabaja 25 minutos en esa presentación.

2. Descansa 5 minutos (levántate, bebe agua, respira).

3. Repite hasta que termines.

7. Habla contigo mismo con cariño

Evita hablarte en términos negativos. Decir “soy un desastre” o “nunca hago nada bien” solo empeora las cosas. Cambia el discurso interno por algo más empático: “Hoy no me he concentrado, pero mañana puedo intentarlo de nuevo”. Sé tu mejor amigo, no tu peor crítico.

8. Encuentra tu propósito

Si la tarea que estás procrastinando no tiene sentido para ti, es normal que la postergues. Pregúntate:

• ¿Por qué es importante esto?

• ¿Qué beneficio obtendré al terminarlo?

Cuando conectas una tarea con tus valores o metas a largo plazo, es más fácil encontrar la motivación. Por ejemplo, si estudias para un examen, piensa en cómo te acerca a tu carrera soñada.

¿Qué hacer si aún así procrastinas?

Incluso con las mejores estrategias, habrá días en los que simplemente no tengas ganas de hacer nada. ¡Y está bien! Aquí van algunas ideas para esos momentos:

1. Acepta tus emociones: En lugar de luchar contra ellas, reconoce que hoy te sientes desmotivado. A veces, aceptar cómo te sientes es el primer paso para superarlo.

2. Haz algo, aunque sea pequeño: Si no puedes con una tarea grande, elige algo mínimo. Lo importante es mantener el hábito de avanzar.

3. Busca ayuda: Hablar con alguien sobre tus objetivos puede ayudarte a ver las cosas con claridad. Un amigo, un mentor o incluso un coach (¡hola, por aquí puedo ayudarte! 😉) pueden ser clave.

Reflexión final: La procrastinación no define quién eres

Todos procrastinamos de vez en cuando, pero no significa que seas una persona perezosa o incapaz. Es un hábito que puede cambiarse con práctica y paciencia. Empieza poco a poco, celebra tus logros y no te castigues por los tropiezos.

Y recuerda: la procrastinación no desaparece de la noche a la mañana. Pero cada pequeño paso que des hacia la acción te llevará más cerca de tus metas. Así que, ¿por qué no empezar ahora mismo? 😊

Espero que estas ideas te sirvan y que pronto puedas despedirte de ese hábito que tanto nos frena. ¿Y tú? ¿Qué estrategias utilizas para vencer la procrastinación? ¡Me encantaría leerte!

José Ignacio Mendez, director del centro de coaching en asturias

¿Te gusta lo que has leído? Compártelo para que más personas puedan leerlo

José Ignacio Méndez

Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *